martes, 12 de mayo de 2009

LO QUE TU Y YO SABEMOS...


Inventando a Marga
escribías palabras en cualquier sitio,
y al correr,
esperando nada,
caía el elixir de tu juventud,
dejándote llevar como papel.

No me iré mañana,
mentías hablándome a los ojos
mientras seguías el murmullo de tus manos.

No me iré mañana,
son ciertas mis palabras.
Como imaginar que la hora del crepúsculo
nunca llena de tesoros la última montaña.

No me iré mañana,
persiguiendo sombras
porque mis gigantes no luchan
ni décimas de segundos.

Pero tú y yo sabemos
que hay amores perros
y tu chica de ayer
ha perdido brillo
en tu desordenada habitación
muerta de frio.

P.S. Toni...